El Manchester United levantó ayer por la noche en Moscú su tercera Copa de Europa de su historia. ¡Los ingleses llevan tres de tres en finales de esta competición!
Los dos conjuntos ingleses tenían la gloria a 11 metros.
La final se decidió en una tanda de penaltis que será recordada muchos años. Fueron unos momentos vibrantes, conmovedores y fatídicos. Los red devils se llevaron el gato al agua, con la suerte del campeón. Cristiano Ronaldo pasó de héroe a villano en unos instantes pero al final los dioses se aliaron con los de Manchester y fue Terry, el gran capitán de los londinenses, quien falló el penalti más importante de la historia del Chelsea. Lo tenían todo de cara pero la suerte les dio la espalda. Van de Sar acertó el lanzamiento de Anelka y la final se fue para el conjunto de Sir Alex Ferguson.
Este partido era la revancha de la Premier League donde el United ganó a los londinenses a los puntos. El primer asalto fue dominado por el Manchester con un gran juego. Desbordaban por las bandas, principalmente por la izquierda, y daban lecciones de juega rápido y directo. En una de sus muchas ocasiones llegó el gol de su crack mediático. Cristiano Ronaldo culminó una buena jugada de su equipo, cabeceando al fondo de la red un centro de Brown. Los de Ferguson siguieron dominando la primera parte y tuvieron buenas ocasiones para incrementar su diferencia en el marcador. Pero en el fútbol no siempre dos y dos son cuatro. El Chelsea en el último minuto marcó el gol del empate. Fue una jugada afortunada para los de Avram Grant, que tras unos rechaces Lampard envió el cuero a las mallas.
En el segundo asalto las cosas cambiaron y el dominio fue del Chelsea que tuvo entre las cuerdas al Manchester. Drogba lanzó un espectacular disparo a la madera. El Manchester también tuvo alguna ocasión aislada. Gracias a la gran solidez defensiva de los diablos rojos y al gran trabajo de Carrick el partido terminó en empate. Se tuvo que ir a la prórroga. En Rusia se doctoraron algunos jugadores en el panorama internacional. Por parte de los "reds devils": Van de Sar, Vidic, Ferdinand, Evra (espectacular), Carrick, Cristiano Ronaldo, Hargreaves y Tevez. Los otros no es que no hicieran un buen partido pero estos destacaron más. En los "Blues": Essien, Carvalho, Ballack, Drogba y Lampard. 
En el tercer y cuarto asalto el Chelsea volvió a pegar más. Lampard envió un balón al larguero. En estos últimos alsaltos se vieron momentos de mucha tensión y nervios por parte de los dos equipos. Drogba fue expulsado. Con todo el Manchester no terminaba de derrumbarse y se tuvo que ir, tras empate técnico, el round de desempate.
Y los diablos rojos ganaron el partido en la siempre cruel tanda de penaltis. La ruleta rusa les fue favorables. No se si fueron los justos vencedores pero si hubieran perdido tampoco creo que hubieran sido justos perdedores. El de ayer se hubiera tenido que resolver con un empate técnico, pero esto en el fútbol no es posible. El empate les llevó a un asalto extra en el cual el Manchester supo pegar en el momento idóneo y tumbó a su rival por K.O. Todo parecía estar de cara los londinenses. Último penalti de la tanda y con la certeza de que si Terry, su gran emblema, acertaba en la pena máxima se llevaban el trofeo. Pero este gran jugador se resbaló en el peor momento y ¡falló el penalti! Nadie se lo podía creer. Los de Manchester cogieron fuerzas y Van de Sar dio el puñetazo definitivo al parar el lanzamiento de Anelka. Entre todas estas emociones decir que Cristiano falló su penalti que apunto estuvo de costarle la final al Manchester. Al final la suerte se alió con ellos y pudo celebrar su primer título continental.
Esta final también ha servido de homenaje a grandes mitos del fútbol. El caso de Scholes, Giggs y Van de Sar. Estos tres jugadores no tardarán en dejar sitio a las nuevas generaciones pero la final de ayer en Moscú sirvo como gran final a sus carreras deportivas.
El Manchester se ha coronado en Moscú como mejor equipo del continente. ¡Merecidamente! Ya que su plantilla tienen una calidad envidiable.
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